El alzheimer y la demencia, son padecimientos que a menudo vuelven incapaces a quienes padecen estas enfermedades. En México, la prevalencia de la enfermedad de Alzheimer es de 7.3% y la incidencia es de 27.3 por 1,000 personas por año. Los estudios de población mexicana han determinado que la enfermedad de Alzheimer está altamente asociada a las mujeres y el riesgo de desarrollarlo aumentan con síndrome metabólico, enfermedad cardiovascular o depresión.
Se trata de una enfermedad degenerativa, progresiva, irreversible y, hasta el momento, incurable, que ataca las partes del cerebro que controlan la memoria, el pensamiento y el lenguaje. Las personas que padecen esta enfermedad pierden gradualmente el sentido del tiempo y el espacio; olvidan cosas que acaban de decir o hacer. Conforme progresa el padecimiento, las personas dejan de tener conciencia de su condición pero conservan la capacidad de experimentar angustia y de percibir manifestaciones de afecto. Al paso del tiempo se les va dificultando cada vez más llevar a cabo las tareas más sencillas como vestirse, comer o asearse, hasta llegar un punto en el que éstas se convierten en algo imposible de realizar. Los enfermos se tornarán incontinentes, serán incapaces de comunicarse y presentarán serios problemas de comportamiento, por lo que requerirán cuidado continuo durante las 24 horas del día. Esta enfermedad se prolonga por varios años, en promedio entre 5 y 10, y no es causa de muerte; normalmente una persona que la sufre morirá de algo diferente como una infección o un infarto.
Las proyecciones son que habrá 3.5 millones de personas mayores afectadas por la enfermedad de Alzheimer para 2050 en México. Los cuidados del paciente son demandantes, una de las principales preocupaciones para los familiares, es que el paciente se extravíe, debido al riesgo y peligro que ello supone. La angustia no solo es para quien cuida al paciente, sino para el paciente mismo, quien puede incluso desarrollar crisis de pánico, el extravío puede ocurrir en cualquier situación cotidiana, a la salida del centro comercial, al salir a caminar cerca de casa o bien, cuando es el paciente quien se escapa.
Por lo anterior, una empresa originaria de Japón ha desarrollado un par de zapatos con gps incluído, que envía notificaciones a los familiares cuando el paciente se aleja de casa. Los Zapatos llevan el nombre de “GPS Dokodemo Shoes” y el localizador que incluyen, está alojado en la suela del zapato izquierdo, proporcionando la posición de la persona a través de los smartphones y ordenadores. Se optó por colocarlo en el zapato porque un reloj o pulsera puede extraviarse. Una alarma suena cuando la persona se aleja 50 metros de casa, pero este valor es regulable. Por el momento estos zapatos, solo están disponibles en Japón, pero sin duda se sumará a la amplia oferta de dispositivos portables que otorgan tranquilidad para los pacientes con Alzheimer y sus familiares.