La diabetes es una enfermedad que ha crecido a la par del crecimiento de la población. Hasta ahora, las personas que la padecen, deberán seguir una serie de recomendaciones médicas para regular sus niveles de azúcar en la sangre. Cuando el cuerpo no es capaz de producir suficiente insulina, los pacientes deben aplicarse una inyección que la contiene, sin embargo, existen diferentes factores por los que las personas no se inyectan la dosis que necesitan y no se trata de simple negligencia, sino por olvido, por no contar con el kit cuando es requerido, porque el medicamento se termina, por miedo a las inyecciones o bien, por no saber aplicarse la inyección sin ayuda de alguien más, entre otros factores.
Hoy en día, se desarrolla un píldora biodegradable, del tamaño de un garbanzo, que contiene una micro-aguja de insulina. Una vez que la cápsula se disuelve en el estómago, la aguja se autoinyecta de manera casi imperceptible para el paciente, ya que en este órgano, no existen fibras receptoras de dolor. ¿Cómo es que la aguja se dispara en la dirección correcta y no se pierde en la pared del estómago? Los científicos encontraron la solución observando la concha de una especie de tortuga que habita en el sur y este de África: la tortuga leopardo, que posee una concha alta, inspirados en esa forma, se realizó un diseño de la píldora que garantizara su funcionamiento, sin importar la manera en la que la cápsula cae en el estómago, ésta se re-acomoda y la aguja queda siempre en contacto con el tejido estomacal.
Una píldora puede administrar hasta 5 miligramos de insulina, la cápsula como cualquier otra, recorre el sistema digestivo sin ocasionar problemas secundarios, la microaguja es biodegradable, por lo que se desintegra una vez que actúa y cuando la insulina ya ha entrado al torrente sanguíneo del paciente.
Esta nueva cápsula, pretende facilitar la administración de insulina a los pacientes con diabetes, mejorando su calidad de vida, disminuyendo el estrés que supone y evitando complicaciones por no aplicarse el medicamento a tiempo. Aunque los resultados han sido exitosos, las investigaciones continúan. Además, se pretende que no solamente se utilice en enfermedades como la diabetes, sino que también, pueda aplicarse en otros padecimientos como artritis reumatoide o enfermedades gastrointestinales.