La córnea es la parte frontal transparente del ojo, gracias a su elevada diferenciación y ausencia de vasos sanguíneos permite la refracción y transmisión de la luz, permite que el iris, la pupila y la cámara interior del ojo, enfoquen correctamente, aporta más del 70% del poder dióptrico del ojo. La topografía corneal es una prueba diagnóstica no invasiva que se emplea para conocer las características de la córnea, realizando un estudio del relieve de su superficie, tanto anterior como posterior, para analizar si existen irregularidades y conocer los diferentes grados de curvatura de esta membrana que recubre la parte exterior del ojo. En los últimos 15 años, la topografía corneal ha recibido un gran impulso, anteriormente, se trataba de  un dispositivo sólo utilizado para investigación, ahora es un instrumento que usan optometristas y oftalmólogos en sus consultas diarias. El impulso definitivo para popularizar el uso de la topografía corneal fue la aparición de la cirugía refractiva con láser ya que es un instrumento imprescindible para el estudio pre-cirugía y post-cirugía.

Aunque existe una gran variedad de topógrafos corneales que se basan en diferentes principios, el resultado es una representación de la superficie corneal que marca su espesor, curvatura, elevación, potencia y relieve, cada técnica tiene sus propias ventajas y limitaciones inherentes. La gran ventaja de la topografía corneal sobre otros métodos es su facilidad para detectar irregularidades corneales invisibles por medio de la mayoría de los exámenes convencionales.

La mayoría de los sistemas de topografía ampliamente disponibles se basan en el principio de reflexión (videoqueratoscopia), aunque ahora hay un número cada vez mayor de sistemas basados ​​en el principio de proyección (estereografía de rasters e interferometría láser). 

Generalmente los sistemas se basan en algoritmos informáticos para convertir imágenes grabadas en información topográfica. Se están desarrollando nuevos algoritmos que incorporan menos estimaciones y suposiciones, con el fin de mejorar la precisión con la que se puede reconstruir la superficie corneal. Se han descrito clasificaciones de topografía normal y anormal basadas en el reconocimiento de patrones, pero esperan mejoras en las redes neuronales artificiales antes de que puedan automatizarse. La informática avanzada también es necesaria antes de que el análisis de datos sea lo suficientemente rápido para que la topografía en tiempo real se convierta en una realidad. Los desarrollos futuros en topografía corneal deben enfocarse en los diferentes requisitos de investigación y práctica clínica.

Sin duda las nuevas tecnologías deben apostar por mejoras que combinen diferentes sistemas de análisis y resultados. Si se tuviera la posibilidad de evaluar qué sucede con la superficie anterior de la córnea cuando el ojo es «pateado» con un chorro de aire, teóricamente podríamos tener datos adicionales que podrían contribuir a un mejor tratamiento y diagnóstico. La topografía corneal dinámica es el objetivo de los nuevos estudios y fabricantes.

Por: Dalia Solano

Fuentes:

cuidatuvista.com
Topografía Corneal.

SMO.
Corneal topography and the new wave.

Scielo.
Proposal for a new approach to corneal biomechanics: dynamic corneal topography.