La teragnosis en Medicina Nuclear consiste en emplear moléculas unidas a isótopos radiactivos para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.

El término teragnosis es una combinación de dos palabras: terapia y diagnóstico, esta modalidad ha experimentado un rápido desarrollo durante las últimas décadas, apoyando la “terapia dirigida” y la “medicina personalizada” gracias a la investigación de un amplio abanico de dianas moleculares. Una vez que el radiofármaco está dentro del organismo, se distribuye a órganos específicos dependiendo del tipo de radiofármaco empleado.

La distribución del radiofármaco es detectado por un aparato llamado gammacámara. Luego se procesa la información obteniendo imágenes de todo el cuerpo o del órgano en estudio. La gran importancia y diferencia de los estudios de Medicina Nuclear, es que son imágenes funcionales y moleculares, es decir, muestran cómo están funcionando los órganos y tejidos explorados o revelan alteraciones de los mismos a nivel molecular.

Los estudios de Medicina Nuclear se utilizan para diagnosticar y determinar la gravedad de muchas enfermedades así como para valorar la respuesta al tratamiento, incluyendo cáncer en diversos tipos, enfermedades cardíacas, gastrointestinales, endocrinas, neurológicas e infecciosas entre otras. Dado que los estudios de Medicina Nuclear pueden detectar alteraciones moleculares dentro del cuerpo, permite identificar enfermedades en sus etapas tempranas (antes que los estudios convencionales de imagen), así como valorar de forma temprana la respuesta al tratamiento.

La teragnosis se ha empleado durante años en el cáncer de tiroides y en hipertiroidismo, actualmente se está implementado en otros tumores con resultados prometedores, como los tumores neuroendocrinos y el cáncer de próstata. La fusión de terapia y el diagnóstico, logra aumentar un 35% la supervivencia de pacientes con un tumor maligno de próstata terminal.

José Luis Carreras, jefe de Medicina Nuclear en el Hospital Clínico San Carlos, en Madrid, habla de “resultados espectaculares” en determinados pacientes terminales. El médico recuerda el caso de un hombre alemán de 62 años, con cáncer de próstata y una diseminación masiva con metástasis en los huesos. Tras un tratamiento experimental con teragnosis en la Clínica Central de Bad Berka (Alemania), ocho meses después parecía limpio. Volvió a trabajar y a hacer deporte. Y tres años y medio después seguía libre de cáncer.

“Esto no es matar moscas a cañonazos, como otras técnicas. Es ir directamente a la célula tumoral y destruirla ‘in situ”, dijo el médico José Luis Carreras. “Hay casos que no responden, pero hay algunos en los que la mejoría es espectacular”, añadió. Su equipo del Hospital Clínico San Carlos va a participar a partir de septiembre en dos ensayos clínicos de teragnosis frente al cáncer de próstata avanzado. Se trata de radioterapia molecular de precisión y personalizada. El procedimiento de la teragnosis consiste en inyectar un fármaco radiactivo en el torrente sanguíneo del paciente a todos los órganos y tejidos del cuerpo. Al actuar, éste ilumina las células cancerígenas, de modo que se pueda diagnosticar de forma mucho más eficiente, apunta la fuente.

La teragnosis consiste en utilizar una molécula con alta afinidad por la PSMA, que es una proteína que suele estar en grandes cantidades en las células del cáncer de próstata. Para hacer el diagnóstico, esa molécula afín al PSMA se une a un elemento químico radiactivo, el galio-68, que brilla en una exploración con tomografía por emisión de positrones (PET). Para el tratamiento, la misma molécula se une a otro elemento químico, el lutecio-177, que emite una radiación local que mata a las células cancerosas. Es como disparar primero una flecha con una bombilla y después otra flecha con una pequeña carga explosiva.

El prometedor tratamiento experimental presentado en el congreso de ASCO, bautizado 177Lu-PSMA-617, estaba en desarrollo en la empresa biofarmacéutica estadounidense Endocyte. El gigante farmacéutico suizo Novartis anunció en octubre de 2018 la compra de esta compañía por unos 1.700 millones de euros. Algunas investigaciones previas, como un estudio con 30 pacientes en 2016 en el Hospital Universitario de Heidelberg (Alemania), ya habían mostrado el potencial de esta estrategia.

El médico José Luis Carreras señala que uno de los problemas de la teragnosis es su elevado precio. Carreras calcula que un tratamiento con teragnosis de un tumor neuroendocrino cuesta unos 65.000 euros por paciente. “Logra una supervivencia más larga que las otras alternativas y el precio es competitivo. No es más caro que la quimioterapia a la que sustituye”, argumenta.

Por: Dalia Solano.

Fuentes:

INER
Medicina nuclear

El país
Teragnosis. Nueva esperanza contra el cáncer.

Milenio
Teragnosis, una nueva esperanza contra el cáncer.