El amplio mercado de cuidado de heridas se mantiene en innovación constante, día con día se busca la forma de mejorar los resultados de las curaciones con materiales estériles, no tóxicos, hipoalergénicos, resistentes y resistentes a la tracción. La industria del cuidado de heridas es un sector increíblemente diverso y altamente competitivo. Se trata de un tema relevante en el mercado mexicano dirigido a una población que continuará creciendo y envejeciendo, sumado a una mayor expectativa de vida y el aumento de pacientes con enfermedades diversas.
La historia de suturas, data desde antes del hombre mismo pues incluso los animales se lamen las heridas para sanar, los materiales utilizados han sido diversos, buscando la mejor opción para su tratamiento, algodón, cuero, crin de caballo y tendones. Ya en la primera guerra mundial se estableció que todas las heridas son potencialmente infecciosas.
Las suturas sin embargo, representan el cierre de oro en las heridas, un material muy utilizado son las grapas de sutura, un dispositivo médico especializado que se usa en cirugía en lugar de las suturas tradicionales. Las grapas comenzaron a utilizarse en 1908, cuando el cirujano Hümér Hültl presentó algo similar a una engrapadora para el cierre una cirugía de estómago, aunque el mercado se extendió hasta la década de los 60’s. Las grapas son de acero o de titanio, materiales que apenas causan alergia, y facilitan el proceso de sutura en sitios difíciles o zonas cuya piel se encuentra muy tensa o sometida a continuos estiramientos, como la espalda o cadera. Las grapas permiten realizar suturas cómodas, rápidas y seguras que tardan menos en cerrar una vez que se ha terminado la intervención quirúrgica, ya que la sutura con hilo y aguja es más laboriosa y lenta, de modo que los músculos (planos más profundos de la herida) se suturan con hilo reabsorbible y la piel (plano superficial) se sutura con grapas, agilizando el proceso y disminuyendo la posibilidad de infección.
A pesar de la evolución de materiales verdaderamente sofisticados y eficientes, como algunos selladores, adhesivos, hemostáticos y pegamentos que han ganado mayor aceptación aún cuando su costo inicial más alto y la renuencia de parte de algunos médicos a usarlos, las grapas y engrapadoras se han mantenido como principales, en la mayoría de las ventas. Los dispositivos de engrapado quirúrgico encuentran su aplicación en cirugía cardíaca y torácica, ginecología, cirugía general, cirugía ortopédica, cirugía estética y otros.
Se estima que el mercado de engrapado quirúrgico se mantendrá en una tasa compuesta anual de 7.6% durante el período de pronóstico 2018-2024, donde se espera que su mayor crecimiento ocurra en Norteamérica seguido por Europa, Asia Pacífico y el resto del mundo. El mercado global de grapado quirúrgico por tipo se segmenta en: grapadoras desechables y grapadoras reutilizables. Las grapadoras desechables ocuparon la mayor parte en 2017 y se espera un aumento de uso.
No deben perderse de vista los novedosos materiales que hoy, ven la luz en el mercado, ni los impuestos sobre dispositivos médicos, costos y demografía. La sutura de heridas incrementará en demanda, pero también exigirá materiales menos invasivos, que ofrezcan todos los beneficios ideales de los materiales de sutura accesibles para toda la población.
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