Robots de desinfección, procedimientos automatizados hacen frente a coronavirus.

Desde hace varias décadas, el gigante Chino se ha caracterizado por sus deslumbrantes avances tecnológicos y la población oriental se ha familiarizado con el uso de robots a un grado tal, que ahora, incluso forman parte de la sociedad para brindar soporte personal emocional, cuando así se requiere. El mundo de la robótica y la inteligencia artificial, parecen solo incrementar la posibilidad de acciones a realizar y frente al brote de coronavirus, los robots están ayudando a identificar síntomas, encontrar nuevos tratamientos y facilitar las interacciones y el tratamiento de pacientes enfermos.

El proceso de desinfección en hospitales es muy importante, porque garantiza la seguridad de los pacientes, ya que su entorno, se encuentra directamente relacionado con la posibilidad de adquirir y desarrollar infecciones nosocomiales. Después de la limpieza, debe realizarse una desinfección profunda. Hoy, los robot contribuyen a evitar la propagación del virus, pues son utilizados como herramientas para desinfectar habitaciones hasta en un 99.9%, eliminando riesgos para médicos y pacientes.

Actualmente, se ha establecido un acuerdo con una empresa con sede en Dinamarca denominada Sunay healthcare, quien se encargará de distribuir robots para que en más de 2,000 hospitales se tenga la oportunidad de garantizar una desinfección efectiva. Ya el año pasado, el robot UVD de la compañía recibió un Premio a la Innovación y el Emprendimiento en Robótica y Automatización.

Sorprendentemente, esta empresa no comenzó la distribución inicial en China, sino en otros hospitales europeos, de Taiwán, Hong Kong, Singapur, Japón y otros países de Medio Oriente. No fue, sino hasta el brote de coronavirus, que se ha incorporado el robot como parte necesaria del programa de contención del virus en China, dando un gran salto de distribución. Actualmente, esta tecnología, comienza en Estados Unidos.

El robot UV-D funciona mediante el uso de luz ultravioleta, que ya ha sido clínicamente probada para eliminar bacterias y virus, desde hace más de 40 años, mismos en los que se ha utilizado para eliminar E. coli del agua potable y plantas de alcantarillado, es sabido que una longitud de onda de 254 nanómetros, tiene efectos germicidas, pero se ha implementado en robots desde hace aproximadamente 10 años.

El coronavirus, que se contagia como una gripe, exige disminuir las interacciones entre humanos con el fin de contener su propagación, además, este robot es capaz de hacer entregas de medicamentos en las habitaciones de los pacientes sin necesidad de que acuda una persona. Cerca de Seattle, este robot que llevaba un estetoscopio, ayudó a los médicos a auscultar a una persona para descartar coronavirus, sin necesidad de exponer al personal humano. Y si pensamos en beneficios secundarios, atrás quedó la necesidad de sanitizar cada vez, la ropa que usa el personal cuando ingresa a las habitaciones de alto riesgo, disminuyendo también, el uso de potentes detergentes y líquidos de desinfección.

Las historias donde los médicos y el personal caen gravemente enfermos en medio de padecimientos altamente contagiosos, comienzan a quedar en el pasado.