La insuficiencia renal, es la última etapa de una enfermedad renal crónica, será necesario dializar al paciente cuando el riñón sólo es capaz de cumplir el 10% de su función. La hemodiálisis, es un tratamiento médico que se realiza con el fin de eliminar sustancias nocivas o tóxicas de la sangre, que luego es dirigida a un dializador que deja pasar los desechos del cuerpo, retiene nutrientes y células sanguíneas y la sangre limpia vuelve a fluir hacia el organismo.
La calidad de vida del paciente es un factor importante en el quehacer médico, científico y tecnológico, constituyendo un referente para los diversos tratamientos que se ofrecen al paciente. En la búsqueda de mejores alternativas, después de 20 años de trabajo, científicos estadounidenses preparan un riñón artificial con filtros de silicio y células vivas que podrá ser implantado en el paciente con el fin de liberarlos de la hemodiálisis. Este riñón del tamaño del órgano natural, filtrará la sangre sin necesidad de acudir a un hospital para realizar el tratamiento que dura de entre 3 y 5 horas, y sin duda que mejorará la calidad de vida de los pacientes. Este riñón biónico, se encuentra a punto de iniciar su fases de prueba en humanos, funciona con la misma tecnología que hace los chips de una computadora o un smartphone, un pequeño paquete que será colocado en cajita cerrada dentro del cuerpo humano, conectado al sistema circulatorio y la vejiga, sin que sea requerido un tubo externo.