México, es uno de los principales productores de dispositivos médicos. La industria se ha denominado como un sector en crecimiento constante para el desarrollo del país. En México, operaron 2,344 unidades económicas especializadas en dispositivos médicos durante 2014, y cerca de 655 empresas registraron exportaciones, principalmente localizadas en los estados de Baja California, Chihuahua, Tamaulipas, Sonora, Nuevo León y Distrito Federal.
El clúster más importante del país se localiza en Baja California, sus empresas representan más de 33% de las exportaciones totales nacionales del sector y en su mayoría están relacionadas con la manufactura y ensamble de equipos y componentes.
El progresivo aumento en el número de personal ocupado en la industria de dispositivos médicos, desde 2007 a la fecha, es un reflejo del crecimiento del sector. De acuerdo con cifras del INEGI, 148,597 personas se encontraban laborando en esta industria, a diciembre de 2014.
Las empresas en México cuentan con 30 plantas de producción que dan empleo a más de 130,000 personas y brindan capacitación a más de 25,000 profesionales de la salud.
Ante la propagación de coronavirus en el mundo, México, juega un importante papel, pero no solamente las empresas, sino todo el personal vinculado a la salud. Médicos, enfermeras, personal de unidades hospitalarias y trabajadores de la producción de dispositivos médicos, laboran para abastecer la demanda en salud que los mexicanos requieren.
En más de una ocasión, hemos visto las historias de médicos y enfermeras que dejan a sus familias para cumplir con su vocación de servicio, sin embargo, se trata de una situación que también ocurre con el sector manufacturero. El factor humano, constituye un elemento invaluable en la producción de dispositivos médicos, tan importante como el desarrollo y tecnología de los equipos, el trabajo de las miles de personas que trabajan en las maquiladoras, constituye la base para satisfacer la demanda de insumos de salud.
Ante la propagación del COVID-19, los fabricantes de dispositivos médicos, deben extremar condiciones de seguridad y otorgar a los trabajadores el equipo necesario para laborar; son conscientes del riesgo, pero saben que de su fuerza de trabajo, depende la vida de millones de personas. El sector médico, se encuentra rebasado en demanda, como ya hemos mencionado en entradas anteriores, empresas que nunca antes se habían dedicado a la fabricación de dispositivos médicos, buscan participar en la producción, aunque para algunos equipos, se requiere completar certificaciones y normas de sanidad.
Es necesario cubrir la demanda para el tratamiento y diagnóstico de pacientes, pero también equipo de protección para todo el personal de salud. Ha incrementado el número de contrataciones para laborar en los centros de fabricación de dispositivos médicos, varios laboratorios cuentan ya con las certificaciones y permisos necesarios, pero saben, que los trabajadores, forman parte fundamental de la producción, muchos tienen miedo de contagiarse o contagiar a sus familias, lo laboratorios tienen el compromiso de otorgar el merecido reconocimiento económico y de seguridad al personal que labora en ello.
“Al principio la pensé, me daba miedo ir a trabajar, contagiarme y regresar a mi casa. Pero también entiendo que lo que hacemos es importante para mucha gente que se enferma o que está en riesgo de morir”, dijo Aracely, quien labora en una de empresas productoras de dispositivos médicos.