Cuando una persona enferma, su cuerpo produce más glóbulos blancos para combatir las bacterias, los virus u otras sustancias extrañas que han causado la afección. Esto aumenta la cantidad de glóbulos blancos.
Otras enfermedades pueden hacer que el cuerpo produzca menos glóbulos blancos de los que necesita. Esto reduce el número de glóbulos blancos. Las afecciones que reducen este conteo incluyen algunos tipos de cáncer y el VIH y sida, una enfermedad viral que ataca los glóbulos blancos. Ciertos medicamentos, entre ellos la quimioterapia, también pueden reducir la cantidad de glóbulos blancos y para estos pacientes, las infecciones pueden ser peligrosas. Conocer a tiempo real si se está produciendo este efecto secundario del tratamiento puede reducir las más de 250.000 infecciones que se detectan anualmente en Europa. Un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) ha desarrollado un dispositivo portátil que detecta el nivel de glóbulos blancos del paciente. No es necesaria una muestra de sangre y se puede usar en casa.
El dispositivo se coloca en el dedo y en sólo un minuto crea un vídeo de los glóbulos sanguíneos. Con esta información, las personas que reciben quimioterapia saben cuándo tomar antibióticos para aumentar la producción de glóbulos blancos.
Similar a un oxímetro de pulso, el proyecto de los investigadores, llamado Leuko, se adhiere a la yema del dedo y usa ciertas frecuencias de luz para iluminar los capilares en el lecho ungueal. Mientras que los glóbulos rojos absorben la luz, los glóbulos blancos no lo hacen y parecen transparentes. Las imágenes recopiladas por una lente pequeña se analizan mediante un algoritmo informático que cuenta las secciones transparentes para brindar una lectura precisa de la actividad de los glóbulos blancos en el torrente sanguíneo.
En los capilares se pueden observar pequeñas partículas moviéndose en el flujo sanguíneo y los investigadores han desarrollado un algoritmo que identifica y cuenta estas partículas para obtener una estimación del número de glóbulos blancos. Si los niveles están por debajo del umbral que los médicos consideran peligroso, pueden tratar inmediatamente al paciente.
El dispositivo portátil, que cuenta los leucocitos a través de la piel a medida que pasan por una lente en miniatura, podría ofrecer a los pacientes inmunodeprimidos una opción menos dolorosa para sus exámenes de laboratorio habituales y podría permitir a los médicos adaptar mejor los tratamientos contra el cáncer para la leucemia y los linfomas. El dispositivo elimina la molestia de viajar al laboratorio o el dolor de ser pinchado con una aguja.
Los oncólogos tendrán una mayor garantía del estado del paciente. Normalmente, los médicos quieren que la quimioterapia sea lo más intensa posible, pero sin que las personas estén inmunosuprimidas. Los ciclos actuales de 21 días se basan en estadísticas de lo que la mayoría de los pacientes puede tolerar, pero si estás listo antes, entonces es posible que te administren tu siguiente dosis con antelación y eso se traduzca en una mejor supervivencia.
El monitoreo portátil de glóbulos blancos en el hogar ofrece muchas ventajas que actualmente no están disponibles. Podría hacer sonar una alarma temprana de sepsis y podría permitir a los médicos adaptar los medicamentos después de la quimioterapia para que se adapten mejor a los tiempos de recuperación del paciente. Aún se trabaja en prototipos, pero pronto podrían estar en el mercado.