Dispositivos wearables y tecnologías de monitoreo en tiempo real tienen el potencial de revolucionar el cuidado de la salud

Los avances en el cuidado de la salud siempre han ido de la mano con los avances en la tecnología médica. Más allá de la producción y distribución de medicamentos, el mundo de la tecnología wearable y el monitoreo en tiempo real de ciertos parámetros estrechamente relacionados con el estado de un paciente son herramientas que tienen el potencial de cambiar la forma en que entendemos y gestionamos nuestra salud.

Actualmente, existen en el mercado diferentes dispositivos tales como relojes inteligentes, parches de monitoreo e incluso lentes de contacto inteligentes: empresas como Google están desarrollando lentes que pueden monitorear los niveles de glucosa a través de las lágrimas.

A pesar de la variedad de ventajas, los wearables no están exentos de desventajas:

• La recopilación constante de datos de salud plantea preocupaciones sobre quién tiene acceso a esta información y cómo se utiliza.
• La posibilidad de malfuncionamiento o inexactitud en los dispositivos puede llevar a diagnósticos erróneos o falta de atención a problemas reales.
• Aunque los precios están disminuyendo, la tecnología wearable todavía puede ser costosa, lo que limita su accesibilidad para todos.

Por otra parte, la dra. Brenda Sandoval menciona en su artículo para Forbes que “es importante tener claro que el dispositivo por sí solo no mejora tu salud, sino que funciona como una herramienta que a través de la gamification (gamificación) y sus diversas funciones hacen que el monitoreo y cuidado de tu salud sea más entretenido e incluso divertido.”

En ese sentido, y volviendo al tema de la entrada anterior, los wearables y la gamificación son conceptos que están interconectados a través de diversos aspectos:

• Muchos dispositivos wearables, como las pulseras de actividad, establecen objetivos diarios para los usuarios, como caminar 10,000 pasos. Al alcanzar estos objetivos, los usuarios reciben notificaciones y recompensas, lo que motiva a las personas a mantenerse activas.
• Al igual que en los videojuegos, los wearables pueden otorgar «trofeos» o «medallas» cuando se alcanzan ciertos hitos, como correr una cierta distancia o mantener una racha de actividad durante varios días.
• Algunas aplicaciones asociadas a wearables permiten a los usuarios comparar sus estadísticas con las de sus amigos o con la comunidad en general, fomentando una competencia amistosa.

Se espera que, en el futuro cercano, la integración de la inteligencia artificial con estos dispositivos permita análisis aún más precisos y recomendaciones personalizadas. Además, la colaboración entre la industria farmacéutica y las empresas tecnológicas podría llevar al desarrollo de dispositivos aún más avanzados, capaces de administrar medicamentos o tratamientos de forma automática y en tiempo real. Estamos en el umbral de una nueva era en la atención médica, donde, a pesar de los desafíos, la tecnología y la medicina se entrelazan para ofrecer soluciones más personalizadas y efectivas.