El cambio de paradigma que genera la simulación tecnológica y la adopción de nuevas tecnologías es significativo. La simulación tecnológica permite a los estudiantes de cirugía general, practicar procedimientos quirúrgicos complejos en un entorno virtual, antes de realizarlos en pacientes reales. Esto reduce los riesgos y mejora la seguridad del paciente. Además, la adopción de nuevas tecnologías permite a los profesionales de la medicina realizar procedimientos quirúrgicos con mayor precisión y eficacia, lo que mejora los resultados para los pacientes.
La realidad aumentada revoluciona el sector de la medicina y la cirugía. Los avances tecnológicos afectan a todas las ramas de la ciencia, incluida la medicina.
La Facultad de Medicina de la UNAM y Johnson & Johnson (J&J) firmaron un convenio con el objetivo de apoyar la educación y formación de los residentes médicos, a través de cursos de simulación en el área de Cirugía General.
“Me da mucho gusto poder oficializar esta relación con Johnson & Johnson, la cual inició hace seis años con un enfoque no solamente desde el punto de vista de enseñanza quirúrgica, sino también con una visión mucho más amplia respecto a lo que podía pasar en el sistema de salud, por lo que ahora el enfoque debe seguir siendo el mismo cuando pensamos en el acceso a los dispositivos médicos, acceso a medicamentos y sobre todo a la atención médica”, afirmó el doctor Germán Fajardo Dolci, Director de la Facultad.
La tecnología ha evolucionado según las nuevas técnicas de intervención y gracias a ello se evidencia un crecimiento exponencial en el uso de dispositivos que generan imágenes intra operatorias y de equipos asociados a los mismos, tales como: Monitores de grado médico, equipos de adquisición de imágenes (angiógrafos, ecógrafos, robots, equipos de tomografía intraoperatorios, resonadores magnéticos para quirófanos, entre otros).
Algunas de las ventajas más importantes del uso de simulación y adopción de nuevas tecnologías son:
Mejora de la precisión y seguridad: La tecnología permite a los estudiantes y a los profesionales de la medicina realizar procedimientos quirúrgicos con mayor precisión y seguridad. Los dispositivos médicos y las herramientas quirúrgicas avanzadas reducen el riesgo de errores y complicaciones.
Facilidad de acceso al conocimiento: La tecnología permite el acceso rápido y fácil a la información y el conocimiento médico a través de plataformas digitales. Los estudiantes y los profesionales de la medicina pueden acceder a la información relevante desde cualquier lugar, en cualquier momento.
Entrenamiento en simuladores virtuales: Los simuladores virtuales permiten a los estudiantes de cirugía general practicar procedimientos quirúrgicos en un entorno controlado y seguro. Los simuladores también permiten la repetición de procedimientos, lo que mejora la habilidad y la confianza de los estudiantes.
Reducción de costos: La tecnología permite reducir los costos de los cursos de cirugía general y los procedimientos quirúrgicos. Por ejemplo, los simuladores virtuales eliminan la necesidad de equipos médicos y herramientas quirúrgicas costosas.
“Nuestro objetivo es acelerar el acceso a través de tecnología a todos nuestros jóvenes cirujanos hacia el futuro y ver de qué forma podemos colaborar para hacer una gran diferencia hacia el futuro de nuestra comunidad; hoy nos encontramos con la firma de este convenio que es un antes y un después con mucho trabajo por detrás en donde nosotros vamos a reforzar el poner esta tecnología a disposición para que estos saltos cuánticos se den”, puntualizó el ingeniero Andrés Gravenhorst, Director General de J&J MedTech México.
A pesar de la gran cantidad de avances en tecnología para salud, se debe realizar la correcta gestión en la evaluación de las prestaciones de estos nuevos equipos y el impacto en el modelo actual de atención de las instituciones. Es por eso que los ejercicios en planificación para su adquisición deben de estar alineados con los modelos en la atención del paciente y las políticas de calidad y seguridad que se quieren implementar o mejorar. El trabajo en equipo, la comunicación abierta (integración y protocolos abiertos), conectividad entre sistemas, la disposición de adaptarse a nuevas habilidades y procesos, son componentes críticos para lograr mejores resultados clínicos y aprovechar al máximo las inversiones en tecnología.