La lesión renal aguda se caracteriza por una disminución aguda de la función renal que puede ser de origen multifactorial y se asocia a mecanismos fisiopatológicos complejos.
A corto plazo, la LRA (lesión renal aguda) se asocia con una mayor duración de la estancia hospitalaria, costos de atención médica, mortalidad hospitalaria, y su impacto se extiende a largo plazo, asociándose la LRA con un mayor riesgo de eventos cardiovasculares, progresión a insuficiencia renal crónica y mortalidad a largo plazo. Dado el impacto del pronóstico de la LRA, es importante reconocer a los pacientes de riesgo y mejorar las estrategias preventivas, diagnósticas y terapéuticas.
DeepMind, la unidad de inteligencia artificial de Google, ha creado un sistema que analiza los registros de salud, incluyendo información como los signos vitales (ritmo cardiaco, frecuencia respiratoria, temperatura y presión arterial) y los resultados de los análisis de sangre. Con estos datos, predice la posibilidad de una lesión renal aguda. El estudio revela que el sistema puede predecir el 55,8% de los casos hasta 48 horas antes de que ocurran. En lesiones renales más graves, como las que requieren un tratamiento de diálisis, la precisión es casi del 90%. El modelo identificó correctamente a 9 de cada 10 pacientes cuya condición empeoró hasta el punto de que necesitaron una diálisis.
La compañía (Deepmind) de Inteligencia Artificial propiedad de Alphabet (Google), se asoció con el Departamento de Asuntos de Veteranos (VA) de los Estados Unidos para desarrollar un algoritmo que predice una lesión renal aguda o insuficiencia renal aguda.
DeepMind también tenía su asistente móvil para médicos, conocido como Streams, evaluado por investigadores de la University College London.
Los resultados muestran que, a través de la aplicación, los especialistas revisaron casos de urgencia en 15 minutos, en lugar de las varias horas que se requieren sin esta tecnología. Con ella solo se perdió al 3.3% de los pacientes, en comparación con el 12.4% sin usar la aplicación. Esta tecnología también condujo a ahorros en los costes de la atención médica. Combinado con el nuevo algoritmo de detección de lesiones renales agudas, de DeepMind, Streams podría ofrecer una detección temprana mejorada.
Con estas herramientas, se espera avanzar en la medicina de un modelo reactivo a un enfoque basado en la prevención. La compañía indica que es solo el principio, y analizará algunas de las otras enfermedades que conducen a millones de muertes cada año y que se pueden prevenir. El equipo planea llevar adelante este trabajo como parte de Google Health, una asociación destinada a fomentar el impacto global.
Además, los investigadores reconocieron que su sistema aún debe pasar las pruebas de atención médica para que los profesionales de la salud evalúen su influencia en los resultados de los pacientes. En todo caso, los desarrolladores confían en que, a futuro, los algoritmos podrán analizar registros digitales de salud para predecir las crisis de los pacientes internados en clínicas, incluidas las neumonías, la sepsis o los ataques cardíacos.
Desde DeepMind afirman confiar en que la combinación de ambas herramientas (algoritmo y app) sirva para avanzar en la evolución desde un modelo reactivo de la medicina a un enfoque basado en la prevención.